La comunidad educativa se asoma al conocimiento de la neuropsicología y las prácticas del networking para construir experiencias de aprendizaje más eficientes.

La cita fue por la tarde en Puerto Madero y en el encuentro no faltó el movimiento, la sorpresa, la motivación ni las notas en el cuaderno de cada uno de los invitados.

Rompió el hielo Marilina Rotger, profesora de enseñanza primaria y universitaria, especialista en neuropsicoeducación y diplomada en neuroaprendizaje.

En su ponencia, los presentes se asomaron a siete aportes neuroeducativos. La motivación que llega de la mano de enseñar desde la novedad y los beneficios del entrenamiento cognitivo de cara a la mejora del aprendizaje, fueron los primeros.

Luego llegaron las ventajas de conocer las fases del aprendizaje; lo relajante, disfrutable y funcional a los objetivos de aprendizaje que puede ser implementar recreos cortos dentro del aula; lo productivo del pensamiento divergente, y lo central del juego como recurso pedagógico.

Finalmente, la oradora resaltó la importancia de construir entornos de aprendizaje en los que se promuevan las emociones placenteras.

“El corazón del sistema educativo se encuentra en las aulas y desde su interior los docentes podemos transformar la educación, con más aulas activas y en movimiento”​

Marilina Rotger,

Por su parte, Sabrina Pardo, Directora de Sistemas de Enseñanza de Santillana en Argentina, llevó a los presentes a pensar en ese deseo que los impulsó a dedicarse a la educación: ese propósito fundacional que luego fue llevado a la práctica. De la mano de Sabrina reflexionamos sobre los planes de implementación necesarios para llevar nuestros sueños a la realidad y sobre qué puede fallar y qué no en una institución educativa.

«Es fundamental elegir las mejores metodologías pedagógicas, porque sobre ellas van a asentarse todas las estrategias de enseñanza y aprendizaje. Además, es clave que las tecnologías que incorporemos sean las que nos permitan adaptarnos a diferentes entornos y lograr nuestros objetivos. Finalmente, el sueño de educar no lo cumplimos solos. Por eso clave que los equipos de personas que nos acompañan sean los más capacitados.»

Sarbina Pardo

Cerró el encuentro Darío Álvarez Klar, Director y Fundador de la red Educativa Itínere. En su espacio Darío guio a los participantes a pensarse como líderes de la transformación de cara a la innovación.

Destacó la importancia de la construcción de una cultura organizacional en cada institución y enfatizó la riqueza de trabajar con otros: en redes y sociedades estratégicas.

«La educación es el gran traccionador social. Cuando se gestiona en red y de manera innovadora, el impacto es mucho mayor.»

Darío Álvarez Klar

El encuentro cerró con un cocktail en el que los directivos y representantes legales de diferentes instituciones compartieron reflexiones e impresiones, así como experiencias, obstáculos y soluciones.